Limpiar sus joyas de vez en cuando es un excelente hábito, pero también es posible cuidarlas mucho a diario. Por lo tanto, evitaremos usarlos cuando hagamos deporte, limpiemos o jardineemos para evitar golpes y contacto con productos químicos. También evitaremos usar nuestras joyas preciosas cuando nademos en el mar o en la piscina. También evitaremos aplicarles productos cosméticos como cremas o perfumes. Además, nos aseguraremos de guardarlos en una caja o bolsa adecuada, especialmente durante el transporte para evitar golpes y arañazos.
Finalmente, si dudamos sobre cómo cuidar nuestras joyas, obtener consejo de uno de nuestros joyerías en una de nuestras joyerías será la mejor manera de evitar errores.