El precio de un diamante en forma de pera se determina en función de su quilate, su pureza, su color y, por lo tanto, su tamaño. En este caso, el tamaño de la pera aquí.
Por ejemplo, para un diamante de color D y pureza IF o FL de 1.00 quilates, el precio variará entre 10 000 y 20 000 euros por piedra.
El precio siempre se calcula en función de los 4C. Estos criterios son esenciales para poder calcular el precio de un diamante.
Sin un certificado de autenticidad, es más difícil evaluar el precio de un diamante, especialmente si es antiguo.
El certificado es una tarjeta de identidad para el diamante, sin él es difícil dar una estimación precisa. En este caso, dependiendo de las joyerías a las que lleves tu diamante, habrá una diferencia de precio anunciado en la estimación.
El precio de un diamante redondo brillante siempre será superior al de un diamante en forma de pera de igual peso. Como la demanda de diamantes redondos brillantes es mayor que la de los de pera, su precio se ve afectado. Por lo tanto, es más económico comprar una forma de pera si tu presupuesto es limitado.
● El valor de un diamante no es proporcional al peso: Un diamante de 1.00 quilate no será 2 veces más caro que un diamante de 0.50 quilate.
● El color del diamante también influye en su valor, el color más blanco es D, un diamante Z tendrá un tono amarillo visible a simple vista.
● La pureza es esencial para determinar el valor del diamante: Los diamantistas han elaborado una escala para definir los diamantes con muchas o, por el contrario, pocas impurezas. Cuanto más limpio sea el diamante, más caro será su precio
Los otros criterios:
● La calidad del corte: Un diamante idealmente cortado tendrá más valor que un diamante mal cortado o mal proporcionado. Un diamante mal cortado será recortado para revenderlo más fácilmente y ganar valor, pero perderá peso y por lo tanto su quilate se reducirá.
● El pulido o la simetría: Si el diamante no es simétrico, perderá hasta un 10% de su valor. Específicamente para el corte de pera, cuya simetría debe ser perfecta.
● La fluorescencia: La fluorescencia se ve gracias a un rayo ultravioleta. Si un diamante tiene mucha fluorescencia, generalmente será lechoso y, por lo tanto, menos buscado por los consumidores.
En un mercado donde los precios están dictados por la oferta y la demanda, los clientes buscan un diamante con poca o ninguna fluorescencia.
● El certificado de gemología: Un diamante que no tiene certificado será mucho más difícil de estimar.